Marc Márquez, preparado para dar el golpe al Mundial en Assen
El piloto español de MotoGP Marc Márquez (Repsol Honda) acude este fin de semana a la "Catedral" del motociclismo, el circuito de Assen, escenario del Gran Premio de Holanda, dispuesto a intentar dar un gran paso en sus aspiraciones a conseguir un nuevo título y afrontar lo más relajado posible el ya cercano parón vacacional.
Superado ya el primer tercio del campeonato, el guión de las últimas campañas no ha variado demasiado y el actual campeón sigue dominando al resto de la parrilla y ya amasa 37 puntos de ventaja sobre su principal rival, el italiano Andrea Dovizioso (Ducati), ya obligado a ganar más carreras para mantener las opciones porque el de Cervera está fallando poco.
El Mundial ya ha devorado siete de sus 20 citas y ahora afronta dos de forma seguida, en Assen y en Sachsenring (Alemania), antes de que los pilotos cojan casi un mes de vacaciones hasta la vuelta a la acción a principios de agosto en Brno (República Checa). El objetivo del catalán es tomarse ese descanso con la mayor renta posible para empezar a gestionar su liderato y provocar que sean otros los que tomen ya riesgos.
Márquez llega a este Gran Premio reforzado por su triunfo en Montmeló, donde además se vio favorecido por la caída de Dovizioso, tirado en una fatídica carambola tras irse al suelo Jorge Lorenzo (Repsol Honda) y que también arrastró a las dos "M1" oficiales, aunque en ese momento ya estaba marcando el ritmo.
El heptacampeón del mundo está siendo muy regular, con sólo el error en su haber en Argentina, pero que ha ganado cuatro pruebas y en las otras dos ha sido segundo, una regularidad de momento inalcanzable para el resto de rivales. Ahora, se enfrenta a un circuito donde ya ganó el año pasado, con su única pole en Holanda, cuatro años después de conquistar la otro que posee en la categoría reina. Desde 2010, está siempre en el cajón del trazado holandés.
Por su parte, su compañero Jorge Lorenzo espera dar en los Países Bajos el paso adelante que pareció ofrecer en el Gran Premio de Catalunya. Tras acudir a la fábrica del Repsol Honda en Japón para hacer cambios ergonómicos, el balear se sintió por primera vez rápido con su nueva moto y buscará volver a codearse con los delante con mejor fortuna en un trazado que no se la ha dado excesivamente bien, ya que desde su triunfo en 2010 sólo ha podido ser tercero en 2015.
Ducati no gana en Assen desde 2008
Ducati se volverá a presentar como la principal amenaza para Marc Márquez tras lo visto en los últimos Grandes Premios donde tanto Dovizioso como su compañero Danilo Petrucci, a 42 puntos del ilerdense, han sido bastante competitivos.
La cita holandesa es clave para el actual subcampeón del mundo, que sabe que no puede dejar escapar más al líder y que además ahora está encontrando la fuerte competencia de su compañero de equipo, ganador en Mugello (Italia) y tercero en Montmeló.
La marca de Borgo Panigale no gana en Assen desde 2008 (Casey Stoner) y el de Forlimpopoli no ha subido ni siquiera al podio en sus últimas cuatro visitas, mientras que Petrucci no tiene que remontarse tan atrás para encontrar su única alegría en la "Catedral", su segundo puesto en 2017.
Tampoco quiere descolgarse de la pelea todavía el español Alex Rins (Suzuki), que está a 39 puntos de Márquez. El catalán está rayando a buen nivel y ya fue segundo el año pasado en este escenario, pero sobre todo necesita mejorar en las calificaciones de los sábados ya que todavía no ha estado en las dos primeras líneas.
Además, las dos Yamaha oficiales de Maverick Viñales y Valentino Rossi tratarán de desquitarse del incidente del Gran Premio de Catalunya y volver a pelear por los puestos destacados, aunque la marca del diapasón parece ahora tener su mejor baza en el pujante joven francés Fabio Quartaro, pole en Montmeló y segundo tras Márquez en la carrera, demostrando su buena adaptación y pilotaje en su primer año en MotoGP.