Rui Patricio y Cristiano frente a Alexis y Bravo antes de Alemania y México
Compartir en:
Europa y América vuelven a rivalizar en el panorama futbolístico en busca de copar la final de la Copa Confederaciones de Rusia con unas semifinales que se presentan equilibradas entre Portugal y Chile y entre Alemania y México.
La actual campeona de Europa y la actual bicampeona sudamericana, los primeros en abrir esta pugna con su duelo en el Kazán Arena. El jueves, en el Fisht Stadium de Sochi, se ven las caras la campeona del mundo y la campeona de la CONCACAF.
Cuatro selecciones nacionales, todas ellas invictas aún en el campeonato, con estilos diferentes y que aspiran a llegar a la final del domingo en San Petersburgo tras confirmar su favoritismo en la fase de grupos.
En la primera semifinal, Cristiano Ronaldo intenta continuar liderando a Portugal para llevarla a otra gran final internacional y aumentar las expectativas a un año del Mundial, aunque enfrente tienen a una Chile muy competitiva bajo el mando de Alexis Sánchez.
De momento, Portugal ha ido de menos a más en esta Copa Confederaciones, pasando del empate inicial con México (2-2) a las sólidas victorias ante Rusia (1-0) y la modesta Nueva Zelanda (0-4) que le dejaron como primero de grupo.
El seleccionador portugués Fernando Santos no pudo contar con Raphael Guerreiro ni con el sancionado Pepe, con dudas hasta el final de Bernardo Silva, aunque el nuevo jugador del Manchester City entrenó con el grupo tras dañarse el pie ante los neozelandeses. Nelson Semedo en el lateral derecho y Bruno Alves y Fonte el centro de la defensa.
Por su parte, Chile también aspira a seguir creciendo en el panorama internacional y tras conquistar de forma consecutiva las dos últimas ediciones de la Copa América, sus primeros grandes títulos, busca ahora un impulso anímico antes de tratar de cerrar su presencia en el Mundial en unas duras Eliminatorias Sudamericanas.
La Roja de América ha mostrado su rocosidad y carácter competitivo, pero el empate en el último partido con Australia le condenó a este duelo de teórica más dureza ante la campeona de Europa, aunque ya demostró ante Alemania su capacidad si tiene a Alexis Sánchez, Arturo Vidal y compañía a buen nivel.
Juan Antonio Pizzi confirmó que tiene a todos sus jugadores a disposición y la única duda para el partido estuvo en el mediocentro Charles Aránguiz, que no está en un mejor estado físico. Un once que se ha caracterizado por su fortaleza defensiva con sólo dos goles encajados antes de medirse con Cristiano Ronaldo, nuevo reto tras frenar a Leo Messi.
En el otro lado, la segunda semifinal de la Copa Confederaciones es la que enfrente este jueves en el Fisht Stadium de Sochi a Alemania y México. La selección de Joachim Loew, vigente campeón del mundo, ha demostrado con creces que pese a su atrevida y cuestionada apuesta por los jóvenes talentos, es uno de los equipos favoritos tras terminar como líder del grupo B.
Alemania, que ha rotado a todos sus seleccionados -a excepción del tercer portero Trapp- sumó a su casillero un total de 7 puntos tras la fase de grupos gracias a sus triunfos ante Australia (3-2) y Camerún (3-1). Sin embargo sembró algunas dudas al no pasar del empate ante una aguerrida Chile (1-1) en la segunda jornada.
Los alemanes tienen enfrente a una selección de México que llega invicta al compromiso de semifinales tras lograr un empate (2-2) ante Portugal en la jornada inaugural e imponerse por 2-1 a Nueva Zelanda primero, y con similar resultado a la anfitriona Rusia después. Pese a contar con los mismos puntos (7) que Portugal, su peor diferencia de goles les privó del liderato del grupo A.
México', única selección de las cuatro semifinalistas que ostenta una Copa Confederaciones (1999), deberá sobreponerse a dos bajas importantes en su envite ante los germanos. Y es que Osorio no podrá contar con Carlos Salcedo, operado de su hombro, ni con el sancionado Andrés Guardado. Además, el central del Espanyol, Diego Reyes, duda hasta última hora por unas molestias en los isquiotibiales.
La actual campeona de Europa y la actual bicampeona sudamericana, los primeros en abrir esta pugna con su duelo en el Kazán Arena. El jueves, en el Fisht Stadium de Sochi, se ven las caras la campeona del mundo y la campeona de la CONCACAF.
Cuatro selecciones nacionales, todas ellas invictas aún en el campeonato, con estilos diferentes y que aspiran a llegar a la final del domingo en San Petersburgo tras confirmar su favoritismo en la fase de grupos.
En la primera semifinal, Cristiano Ronaldo intenta continuar liderando a Portugal para llevarla a otra gran final internacional y aumentar las expectativas a un año del Mundial, aunque enfrente tienen a una Chile muy competitiva bajo el mando de Alexis Sánchez.
De momento, Portugal ha ido de menos a más en esta Copa Confederaciones, pasando del empate inicial con México (2-2) a las sólidas victorias ante Rusia (1-0) y la modesta Nueva Zelanda (0-4) que le dejaron como primero de grupo.
El seleccionador portugués Fernando Santos no pudo contar con Raphael Guerreiro ni con el sancionado Pepe, con dudas hasta el final de Bernardo Silva, aunque el nuevo jugador del Manchester City entrenó con el grupo tras dañarse el pie ante los neozelandeses. Nelson Semedo en el lateral derecho y Bruno Alves y Fonte el centro de la defensa.
Por su parte, Chile también aspira a seguir creciendo en el panorama internacional y tras conquistar de forma consecutiva las dos últimas ediciones de la Copa América, sus primeros grandes títulos, busca ahora un impulso anímico antes de tratar de cerrar su presencia en el Mundial en unas duras Eliminatorias Sudamericanas.
La Roja de América ha mostrado su rocosidad y carácter competitivo, pero el empate en el último partido con Australia le condenó a este duelo de teórica más dureza ante la campeona de Europa, aunque ya demostró ante Alemania su capacidad si tiene a Alexis Sánchez, Arturo Vidal y compañía a buen nivel.
Juan Antonio Pizzi confirmó que tiene a todos sus jugadores a disposición y la única duda para el partido estuvo en el mediocentro Charles Aránguiz, que no está en un mejor estado físico. Un once que se ha caracterizado por su fortaleza defensiva con sólo dos goles encajados antes de medirse con Cristiano Ronaldo, nuevo reto tras frenar a Leo Messi.
En el otro lado, la segunda semifinal de la Copa Confederaciones es la que enfrente este jueves en el Fisht Stadium de Sochi a Alemania y México. La selección de Joachim Loew, vigente campeón del mundo, ha demostrado con creces que pese a su atrevida y cuestionada apuesta por los jóvenes talentos, es uno de los equipos favoritos tras terminar como líder del grupo B.
Alemania, que ha rotado a todos sus seleccionados -a excepción del tercer portero Trapp- sumó a su casillero un total de 7 puntos tras la fase de grupos gracias a sus triunfos ante Australia (3-2) y Camerún (3-1). Sin embargo sembró algunas dudas al no pasar del empate ante una aguerrida Chile (1-1) en la segunda jornada.
Los alemanes tienen enfrente a una selección de México que llega invicta al compromiso de semifinales tras lograr un empate (2-2) ante Portugal en la jornada inaugural e imponerse por 2-1 a Nueva Zelanda primero, y con similar resultado a la anfitriona Rusia después. Pese a contar con los mismos puntos (7) que Portugal, su peor diferencia de goles les privó del liderato del grupo A.
México', única selección de las cuatro semifinalistas que ostenta una Copa Confederaciones (1999), deberá sobreponerse a dos bajas importantes en su envite ante los germanos. Y es que Osorio no podrá contar con Carlos Salcedo, operado de su hombro, ni con el sancionado Andrés Guardado. Además, el central del Espanyol, Diego Reyes, duda hasta última hora por unas molestias en los isquiotibiales.
Compartir en: