Kittel logra la "manita" en el Tour y gran susto para Contador
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El alemán ha demostrado una vez más que no tiene rivales en las llegadas al sprint y ha sumado su quinta victoria parcial, segunda consecutiva, con mucha autoridad por delante del holandés Dylan Groenewegen (Lotto NL) y el noruego Edvald Boasson-Hagen (Dimension Data).
Por su parte, la jornada, que ha dejado de nuevo en el liderato al británico Chris Froome (Sky), ha tenido el susto que ha sufrido el español Alberto Contador (Trek), que se ha ido al suelo a falta de 20 kilómetros. El ciclista madrileño se hizo algunos rasguños y gracias a la ayuda de Jarlinson Pantano no tuvo excesivos problemas para volver a la disciplina del pelotón, aunque habrá que ver si el golpe le afecta para la primera batalla en Pirineos.
"Ha sido un día complicado. Un día de estos en los que en principio no sabes cómo van a salir las cosas y nos hemos ido al suelo. Nunca he creído en la mala suerte pero este Tour me está poniendo un poco al límite sobre todo psicológicamente", indicó tras cruzar la meta en Pau. "Al igual que te digo esto, la gente que piensa que me voy a dar por vencido es que no me conoce", añadió un Contador que quiso sacar optimismo.
"Tengo algún golpe fuerte. Uno en la cadera bastante fuerte pero habrá que ver cómo va pasando el día. Esto me complica todo para los Pirineos, pero no me voy a venir abajo", apuntó. "En vez de pensar ya en otros objetivos hay que estar con más determinación si cabe. Esto no ayuda y habrá que esperar a Los Alpes, pero la moral siempre la tengo alta. Vamos a ver qué podemos hacer en lo que queda de Tour", finalizó.
La duodécima etapa partirá de Pau y tras 214 kilómetros terminará en alto, en Peyragudes, de apenas dos kilómetros y medio y de segunda categoría, pero situado a continuación del Peyrosourde, de primera. Antes de ambos estará el Port de Bâles, de categoría especial, punto más duro de un día con otros tres puertos más.
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